Desc: Roman einer Verschollenen: Dirigida por Franz Hofer. Con Margarete Hübler, Emmerich Hanus, Emmy Raabe-Burg. Nina, que ha caído en el mal y se ha hundido en la degradación, lee sobre el éxito de su hermana gemela, Cleo Valiere, periodista, que ha escrito una novela que ha obtenido un gran éxito. Las hermanas llevan mucho tiempo separadas. Cleo ha tratado de ocultarle a su rico y aristocrático marido la ignominia del despilfarro de su hermana. Cuando ve a la chica lasciva a punto de entrar en su casa, se aterroriza ante la posibilidad de que se conozca el parentesco. Le suplica a Nina que se vaya y trata de suavizar las dificultades de ese rumbo con el lubricante del dinero. Mientras conversan se queman las fábricas del marido de Cleo. Al intentar rescatar a los trabajadores resulta gravemente herido. Mientras lo llevan a la casa, Cleo saca apresuradamente a su hermana, envuelta en una capa que le regaló su marido. Nina es confundida con Cleo y contra su voluntad la llevan junto a la cama del hombre herido. En su estado semidelirante no percibe que ella no es su esposa. Nina, asustada, huye de la casa. La ve el médico, que la sigue hasta la puerta de su inmersión baja. Sospechando e indignado de que Cleo, de cuya identidad no tenía dudas, esté manteniendo un amor ilícito con su marido al borde de la muerte, el médico se enfrenta a Cleo al día siguiente y le exige una explicación. Ella le ruega que cese sus interrogatorios. Desafortunadamente, el marido lo escuchó. Levantándose tambaleándose de la cama, la denuncia. Nina vuelve a ir a buscar dinero a casa de Cleo esa noche. Lleva la capa que le había regalado Cleo. Se desata una terrible tormenta. Henry, el marido, consumido por la ansiedad, ha buscado en vano a su esposa. Fascinado por la magnificencia de la tempestad, está junto a la ventana. Un vívido relámpago ilumina el terreno. Vislumbra la figura familiar de su esposa envuelta en una capa familiar, entrando a la casa a través de una ventana francesa. Se oye un trueno ensordecedor, un zigzag cegador de llama eléctrica. Aturdido, Henry se tambalea hacia el refugiado de la tormenta. Muerta, chamuscada, ennegrecida por la furia de los cielos, ella yace. Angustiado, se pone de pie. La puerta se abre. Entra una mujer. Él mira desconcertado. es su esposa.